¿Por qué los niños tienen más huesos que los adultos?

A medida que el cuerpo humano va creciendo o desarrollándose nos damos cuenta que va cambiando de diferentes formas, no es una excepción los huesos, desde que somos un bebé hasta que crecemos como adultos nuestros huesos cambian.

Desarrollo de los huesos

Durante la formación y el desarrollo del ser humano, los huesos pasan por tres estados: mucoso (los huesos antes del nacimiento), cartilaginoso (huesos del recién nacido) y óseo (el hueso ya adquirió su consistencia definitiva).

El crecimiento más importante de los huesos ocurre en la infancia. El proceso de crecimiento finaliza entre los 20 y 25 años. Aunque el crecimiento en longitud es mucho más evidente, los huesos también crecen en ancho.

Después del sexto mes de embarazo, los glóbulos sólo se crean en la médula roja de los huesos largos. A partir los 19 años de edad, los glóbulos se producen en la médula del esternón, en las costillas y en las vértebras.

Luego de desarrollarse en su totalidad en el interior de los huesos, los glóbulos rojos se trasladan a la sangre y se disipan en el hígado.

Higiene del sistema óseo en niños

En la etapa de crecimiento, los niños no deben soportar pesos superiores a los que puedan sostener.

Los escolares deben sentarse en posición correcta para que la columna vertebral no se desvíe y pueda ocasionar lordosis, cifosis o escoliosis.

Practicar deportes sin cansarse en exceso. Los ejercicios muy bruscos pueden crear fracturas y dislocaciones. Es por ello que se sugiere no practicar deportes que tengan grandes esfuerzos para la niña o niño.

La alimentación debe ser rica en sales de calcio, hierra y fósforo para evitar el raquitismo, enfermedad que se caracteriza porque los huesos quedan blandos, se deforman y no crecen.

Número de huesos en los niños

Los bebés cuando nacen poseen más de 300 huesos, ya que están pequeños y todavía les queda un crecimiento por delante. Se ha comprobado que todos estos huesos se unen hasta formar los 200 huesos que poseen los adultos.

En conclusión, la respuesta a ¿Por qué los niños tienen más huesos que los adultos? Es porque no se han desarrollado y formado lo suficiente hasta fusionarse todos.